Funcionan gracias a un termistor que varía su resistencia eléctrica en función de la temperatura. Existen varios tipos de termómetros digitales, entre ellos tenemos:
Estos registran de manera muy veloz la temperatura de los alimentos, entre 2 y 5 segundos. Están disponibles en diferentes formatos pero las sondas son las más requeridas para la cocción de alimentos a nivel industrial, al igual que para la investigación médica.
También es un instrumento muy requerido en cocinas industriales, pues mide la temperatura de los alimentos. La parte del tenedor se incrusta y la temperatura se indica en una pantalla digital.
Los médicos recomiendan que nuestro botiquín de primeros auxilios contenga un termómetro digital para casos de fiebre donde se requiera medir continuamente a la persona afectada, de tal manera que se le otorgue atención médica en el momento indicado.
Estos termómetros usan un rayo infrarrojo para medir la temperatura dentro del canal auditivo.
También se les conoce como termómetros de frente y usan un escáner infrarrojo para medir la arteria temporal en la frente. Registran rápidamente la temperatura y son apropiados para bebés mayores de 3 meses y niños.